Tras la derrota del Cádiz CF ante el UCAM, donde agudizó su mal comienzo liguero además acompañado de un mal juego, toca analizar cuál es la situación en el seno del equipo. Jorge Cordero, director deportivo del club, que pasó por el programa Carranza 10 de 8TV Cádiz, reconoce estar preocupado por esa racha pero también que se mantiene tranquilo. “Fue una derrota dolorosa, por cómo fue. El equipo no estuvo bien pero a pesar de eso el rival tampoco mereció la victoria, porque con poco que hicieron nos metieron un gol. El comentario generalizado es el de apuntar al entrenador pero nuestra respuesta siempre es la misma: tenemos que ganar el domingo a La Hoya y trabajar para lograr el domingo una victoria. Hay que confiar en los jugadores, en Antonio Calderón que es nuestro entrenador. Estamos contentos con la actitud aunque no con el resultado y el juego. Necesitamos dos o tres victorias consecutivas que le dé al equipo una regularidad que nos ponga en los puestos de arriba. Hay plantilla, entrenador y actitud”.

Preguntado sobre la posibilidad de que un nuevo mal resultado ante La Hoya pueda precipitar acontecimientos como la destitución del técnico solo respondía que no se plantea hipótesis. “Estoy convencido de que Antonio Calderón será el entrenador que ascenderá a este equipo a Segunda División A. El entrenador, jugadores y todos estamos dolidos. Solo hay que ganar el domingo para cambiar esta situación”.

En La Condomina se realizaron muchas variaciones en el juego del equipo al prescindir desde el inicio de extremos y jugar con Mantecón y Machado más centrados. El director deportivo explicaba su visión de las mismas. “Se buscó sorprender al rival con hombres por dentro para que las bandas fueran aprovechadas por los laterales, pero lo cierto es que no funcionó”.

Ver al Cádiz con siete puntos y más debajo de la mitad de la tabla no era el escenario previsto durante la pretemporada. Ahora habrá que darle la vuelta a todo ello. “Es evidente que cuando comenzamos esperábamos estar arriba en el comienzo de la competición, con resultados y los jugadores con la moral alta. Eso ahora no lo tenemos y estamos a remolque. Por eso tenemos que apretar todos, jugadores, técnico y yo mismo, para que todo cambie”.

Si el pasado domingo una victoria era urgente, para este en casa ante La Hoya es más que obligatorio. “Los jugadores tienen que tener claro que esas ocho o diez mil personas vienen a animar. Tienen que verlo de manera positiva porque más les gustaría a los otros equipos tener lo que tenemos. Eso debe ser un aliciente para los jugadores. El domingo jugarán aquellos que estén preparados para estos partidos. Pero esa presión será máxima todos los domingos. Para mí todos están para este tipo de partidos”.