El entrenador del Cádiz CF, Álvaro Cervera, fue testigo directo desde el autobús del equipo del recibimiento que hicieron los aficionados cadistas el pasado domingo a través de una moto-quedada convocada por Brigadas Amarillas y no ha dudado en referirse a la misma en la rueda de prensa previa al encuentro contra el Getafe CF.

"El otro día vi 200 o 300 motos y volví al pasado. A nuestra gente la necesitamos porque te quita la presión que tienes y te la llevas a casa".

Esta respuesta vino tras ser preguntado por si Cervera estaba disfrutando esta temporada o estaba siendo dura para él.

El técnico explicó que "yo hago que mi trabajo sea disfrutable. Yo todas las mañanas me levanto y sé que vestuario me voy a encontrar, qué ayudantes y qué compañeros. Durante cinco años he hecho que venir al Rosal sea un acto de estar contento y que nada me va a cambiar la sonrisa de por la mañana. Eso lo hemos conseguido nosotros" y añadió que "la presión es tremenda. Este año ha habido reacciones mías cuando he estado solo que no las he tenido otros años. He tenido que coger el teléfono porque tienes que hablar con alguien".