La Fundación del Cádiz CF ha comprado una vivienda en Cádiz para evitar el desahucio de María, una vecina de 87 años, del barrio del Pópulo. María iba a ser desahuciada el próximo 26 de junio, pero un acuerdo de última hora ha permitido que no tenga que marcharse. Los propietarios del inmueble, un grupo de familiares que heredaron el edificio, han pedido suspender el desahucio previsto tras llegar a un acuerdo para vender la casa.

La intervención de la Fundación del Cádiz CF en esta operación ha sido crucial. María y su familia, angustiados desde hace meses por la amenaza del desahucio, podrán respirar tranquilos. María vive en esta casa desde 1967, cuando se mudó junto a su marido Antonio. El edificio pertenece a los herederos de Emilio Beltrami, alcalde de Cádiz entre 1976 y 1979.

Inicialmente, los propietarios querían vender el edificio completo, pero al no ser posible, optaron por vender las viviendas por separado. Algunas se han convertido en viviendas turísticas. María pagaba 97 euros mensuales en virtud de su contrato inicial, pero tras la muerte de Antonio, a cuyo nombre estaba el contrato, no pudo subrogar el alquiler a tiempo.

Los propietarios ofrecieron a María tiempo para buscar una nueva vivienda, pero sus hijos no lograron encontrar una alternativa adecuada. La ofrecieron comprar la casa por 147.000 euros, oferta que no pudieron aceptar, lo que llevó a una batalla judicial. El juzgado de instrucción número seis de Cádiz dictó una sentencia favorable para los propietarios, obligando a María a dejar su casa el 26 de junio.

Radio Cádiz, de la Cadena SER ha informado que los propietarios han tramitado la petición de suspensión del desahucio tras firmar un contrato privado con arras con la Fundación del Cádiz CF para la compra de la vivienda. Eva, la hija de María, expresó su agradecimiento: "Mi madre se queda en casa. Aún hay personas que tienen corazón, empatía y humanidad". El caso de María había generado una reacción social en su barrio, con movilizaciones preparadas y casi 30.000 firmas recogidas por la Fundación Adopta un Abuelo para apoyarla. Facua y la plataforma Cádiz Resiste también se involucraron en el caso.