El final de temporada será duro para el Cádiz CF Virgili, con un Miguel Gago que tendrá que buscar la fórmula de acabar el curso de la mejor manera posible, a pesar de las numerosas bajas y las diversas altas que se han producido en las últimas semanas en la sección cadista de fútbol sala. El equipo está 6º en la clasificación del Grupo 5º de Segunda División B del Fútbol Sala, y si bien no peligra su continuidad en la categoría, cada vez está más lejos de alcanzar la tercera plaza que podría darle el pasaporte a jugar el campeonato de la Copa del Rey.

Desde que comenzó la temporada el ir y venir de jugadores ha sido una constante. De los que comenzaron han acabado por irse a otros clubes Ale Paleta, Joaqui y Juan Vega; y luego firmaron Álex del Amor y Tote que también han causado baja, sin contar los casos de Nene y Juanlu que con lesiones de gravedad han dicho adiós a lo que resta de temporada.

Para ir cubriendo el vacío que dejaron las bajas se firmaron nuevos jugadores, como son los casos de Marcos Curbelo, Edu Zuza, Fernando, Rubio y Poti.

Pues en los últimos días dos nuevas bajas se suman a las antes citadas. Se trata de Marcos Curbelo, que abandona el club por incompatibilidad horaria con sus labores profesionales, y Miguel Valiente, que ha alegado razones personales para rescindir.

Marcos es portero y llegó para suplir la baja de Juanlu en portería, ya que tuvo que pasar por quirófano y su participación en esta temporada era imposible. Por su parte Miguel Valiente comenzó desde principio de temporada a entrenar a las órdenes de Miguel Gago pero su pasado en el fútbol (llegó procedente del Puerto Real CF y anteriormente jugó en el Orihuela CF y el Cádiz CF B) ha podido pesar para que no acabara de adaptarse como él hubiese pretendido en el fútbol sala.

Ahora a Miguel Gago se le abre la posibilidad de contar con los jugadores del Cádiz CF Virgili Juvenil para completar convocatorias cada semana o bien acudir al mercado a hacer alguna incorporación hasta final de temporada. La homogeneidad de la plantilla de principio de temporada ya es una utopía y ahora la misión es el acabar la liga de la mejor manera, sin enturbiar el trabajo realizado hasta la fecha.