El futuro de Chris Ramos comienza a generar incógnitas mientras su nombre circula en los entornos de mercado. Aunque el delantero gaditano tiene contrato en vigor con el Cádiz CF hasta junio de 2028, su situación actual y el contexto del club alimentan la posibilidad de un posible cambio de aires en este mercado estival.

El atacante, con 28 años recién cumplidos, completó una de sus mejores campañas como profesional. Diez goles, seis penaltis provocados y un papel destacado en el juego ofensivo del Cádiz CF lo colocaron bajo la lupa de varios clubes.

En enero de 2024, el Celta de Vigo intentó su incorporación en el último día del mercado invernal. La operación no se concretó por decisión del club gaditano, que en aquel momento optó por mantener su bloque ofensivo. Sin embargo, esa tentativa dejó claro que hay mercado para Ramos, tanto dentro como fuera del país.

La situación contractual del delantero no impide el interés de otros equipos. Al contrario, lo fortalece como una operación viable, siempre que haya acuerdo económico que el Cádiz CF termine viendo con buenos ojos. Su vinculación hasta 2028 concede al Cádiz CF margen para negociar desde una posición de fuerza. Al mismo tiempo, desde el entorno del club se desliza la posibilidad de "hacer caja" con alguna de las piezas más rentables de la plantilla.

El contexto del Cádiz CF también influye. Tras consumarse el descenso a Segunda División y la necesidad de reajustar el presupuesto y remodelar la plantilla en el segundo año consecutivo en la categoría de plata, se presenta como un escenario propicio para traspasos estratégicos. Y Chris Ramos, con mercado y rendimiento reciente, figura entre los activos con más valor.

Por ahora, el jugador sigue vinculado al equipo y muy probablemente comenzará la pretemporada, si finalmente no se concreta ninguna operación próximamente. Queda por ver si llega esa oferta y si no llega, que se convierta en una pieza clave para Gaizka Garitano en la temporada 2025-2026.