Una nueva generación de robots miniatura está revolucionando el mantenimiento de las infraestructuras subterráneas en Reino Unido. Se trata de los pipebots, pequeños autómatas diseñados para recorrer el interior de las tuberías de agua y detectar problemas antes de que se conviertan en averías costosas.
Robots del tamaño de una taza
Estos dispositivos, del tamaño aproximado de una taza de café, están equipados con cámaras, sensores de movimiento y módulos de comunicación. Su función es patrullar las redes de saneamiento, especialmente las de difícil acceso, para identificar fugas, obstrucciones o deterioros estructurales.
Dónde se están probando y con qué resultados
El proyecto se desarrolla en colaboración entre universidades británicas y empresas del sector del agua. Actualmente, se están realizando pruebas en zonas urbanas de Inglaterra, donde las tuberías más antiguas requieren vigilancia constante. Los resultados iniciales muestran que estos robots podrían ahorrar millones en reparaciones y reducir significativamente las interrupciones del servicio.
Cómo funcionan y por qué son tan innovadores
A diferencia de las inspecciones tradicionales, los pipebots pueden operar sin necesidad de excavar calles ni cortar el suministro. Su autonomía y capacidad para comunicarse en entornos hostiles subterráneos los convierte en una solución práctica y sostenible.
Futuro y posibles usos en otras ciudades
Aunque por ahora su uso se concentra en Reino Unido, expertos consideran que estos robots podrían aplicarse en otras ciudades europeas con infraestructuras envejecidas. También se estudia su adaptación para redes de gas y otras instalaciones industriales.