Tres partidos de esta temporada son el referente de lo que se desea de este Cádiz CF. Dos de ellos llegaron en Copa del Rey (en Lepe y en La Línea) y el último en Liga ante el Sevilla Atlético. En esas tres ocasiones se conjugaron resultado y juego y hubo aspectos en común que se antojan como los pilares en los que se debe basar el equipo para dar su mejor imagen.

Dibujo táctico

Antonio Calderón se vio obligado en Lepe a realizar algún cambio con respecto al dibujo sobre el césped. Las ausencias en aquel momento de Jona que estaba con su selección y una lesión de Airam, no le permitió contar con ninguno de sus dos delanteros. Optó por jugar con Villar como jugador más adelantado y con Kike Márquez en la mediapunta.

En la Línea fue el primer día en el que se dejó atrás de manera clara jugar con dos arietes y esa decisión tuvo continuidad en partidos posteriores como el del Sevilla Atlético.

El Cádiz ha crecido con ese 4-2-3-1.

Equilibrio entre defensa y ataque

La figura del mediapunta ha dotado al Cádiz de esa imagen de equipo compacto, ordenado y solidario. Ocupa menos espacio sobre el terreno de juego y la presión al rival se realiza de manera más sencilla y eficaz. El equipo no tiene a romperse como ocurría en anteriores ocasiones y los dos mediocentros están más liberados de tareas defensivas pues parte de estas recaen sobre el 10. En los tres partidos en los que se vio al mejor Cádiz se podía ver a casi todo el equipo en campo rival manteniendo al contrario muy cerca de su propia área. Eso no solo hace aumentar las posibilidades de llegadas sino la facilidad del robo de balón si éste se pierde.

Intensidad desde principio a fin

En Lepe llegaba el primer gol y el equipo jugó con la misma intensidad para lograr el segundo. Llegaba el segundo y se buscaba el tercero hasta que se conseguía. El marcador no se movería pero nada cambió y se miraba al área lepera para seguir intentando marcar.

Ocurría lo mismo en La Línea y en Sevilla, a pesar de que en estos dos casos se recibía un gol que le ponía en desventaja. En esos tres partidos el Cádiz no se comportaba como un equipo visitante sino como uno local. La ecuación es fácil: correr al menos lo mismo que el rival y que la calidad haga el resto.

Bajo esas tres premisas trabaja el Cádiz CF de Calderón. Han descubierto el camino y es el que deben de seguir. Luego habrá ponderantes como el terreno de juego en el que te toque jugar, el cual te podrá permitir un fútbol más o menos preciosista. Se podrá estar también más o menos acertado de cara a gol. Pero esos tres aspectos parecen ser innegociables para lograr resultados y, en más que menos tardes, buen fútbol.