El que fuera futbolista del Cádiz CF, Pablo Hernández, que llegó en calidad de cedido por el Valencia CF en el mercado invernal de la temporada 2006-2007, forma parte del grupo inversor en el que también está el futbolista Ángel Dealbert que ha accedido a gestionar el CD Castellón, que por lo pronto ha forzado la salida del hasta ahora presidente, David Cruz, y la llegada de un nuevo Consejo de Administración liderado por el empresario Vicente Montesinos.

El CD Castellón es un histórico del fútbol español, fundado en 1922 y que cuenta con 11 temporadas en Primera División, pero los últimos seis años ha militado en Tercera División, aumentando la deuda del club y dejándolo, tras caer eliminado de la fase de ascenso este año, al borde de la desaparición.

La llegada del grupo inversor de Pablo Hernández es un soplo de aire fresco para el club castellonense, que en un futuro podría traducirse en un control accionarial de la entidad, para alegría de sus ya hastiados aficionados. Aficiondaos que tienen un nuevo motivo para apoyar al equipo de su tierra al que no dejará caer el actual futbolista del Leeds United, que se marca el objetivo de salvarlo y llevarlo a Segunda División en los próximos años.

Pablo Hernández Domínguez nació el 11 de abril de 1985 en Castellón y comenzó jugando al fútbol en el CD Onda y posteriormente en el Valencia CF, que lo cedía al Cádiz CF y posteriormente al Getafe CF, antes de llegar por derecho al primer equipo valencianista en el que estuvo durante cuatro temporadas y firmar posteriormente por el Swansea City AFC y Al-Arabi SC (Qatar) y Al Nasr Dubai SC (Arabia Saudí), Rayo Vallecano y Leeds United (Inglaterra).

Pablo Hernández jugó en el Cádiz CF un total de 1704 minutos repartidos en 22 partidos, y anotó 4 goles.